Consumo de medicamentos
La Cloroquina e Hidroxicloroquina usados en el tratamiento de enfermedades como artritis reumatoidea y lupus entre otras, ofrecen excelentes alternativas de tratamiento de estas enfermedades, pero su consumo siempre debe ser monitorizado por un médico oftalmólogo pues puede ocasionar depósitos a nivel de la retina que llevan a pérdida visual que en algunas ocasiones es grave. Su uso bajo condiciones controladas es excelente.
Un control apropiado requiere toma de imágenes internas del ojo antes de iniciar el tratamiento para descubrir cualquier cambio en el aspecto de la retina de manera temprana, también se requiere seguimiento en la visión de colores y campo visual.